Actualidad
El 'paraíso fiscal' chipriota, a punto de convertirse en 'infierno'
La propuesta de introducir un impuesto sobre los depósitos bancarios en Chipre generó malestar en los mercados amenazando con convertir al país de 'paraíso fiscal' en 'infierno financiero' y con repetir el escenario de la crisis de 2008.
La propuesta de la quita a los depósitos bancarios en Chipre fue anunciada el pasado 16 de marzo. En un principio, contemplaba la retirada del 6,75% de los depósitos menores de 100.000 euros y del 9,9% de los que excedan de esa cantidad, permaneciendo intactos los depósitos de hasta 20.000 euros.
Este impuesto extraordinario tenía el objetivo de recaudar los 5.800 millones de euros exigidos por la UE y el FMI para entregar el rescate por valor de 10.000 millones de euros solicitado por la isla.
El 16 de marzo Chipre congeló parcialmente los depósitos bancarios, lo que sorprendió a los chipriotas que ante la introducción de la medida, se apresuraron a retirar dinero de sus cuentas formándose largas colas ante las entidades bancarias.
Tras el 'pánico' que la posible implantación de la medida produjo en los mercados, los ministros de Finanzas de los 17 países de la eurozona instaron el pasado 18 de marzo a proteger los ahorros por valor de hasta 100.000 euros o inferiores, para que la tasa pudiera aprobarse. A cambio, propusieron elevar la quita a los depósitos más altos hasta el 15,6%.
La decisión preliminar sobre dicho impuesto fue tomada por el Gobierno ante la insistencia de los acreedores de la UE, pero causó una gran incertidumbre entre los inversores amenazando a la misma existencia del sistema financiero de Chipre. Por su parte, el Parlamento de Chipre rechazó el impuesto sobre los depósitos del país en una votación celebrada el 19 de marzo, bloqueando así el rescate que el país necesita para mantener a sus bancos a flote y para pagar los salarios de los funcionarios y los servicios sociales.
El mercado bursátil internacional, a su vez, manifestó su creciente desconfianza hacia el sistema financiero y el ‘paraíso fiscal’ chipriota, lo que se ha reflejado ya en una importante bajada de la cotización del euro como divisa y de las empresas y las entidades bancarias del país isleño.
Algunos expertos advierten que el país podría pagar un alto precio a nivel macroeconómico, dado que los impuestos de este tipo no solo afectarían a los chipriotas sino a miles de europeos y rusos con intereses comerciales y financieros en Chipre.
Este impuesto extraordinario tenía el objetivo de recaudar los 5.800 millones de euros exigidos por la UE y el FMI para entregar el rescate por valor de 10.000 millones de euros solicitado por la isla.
El 16 de marzo Chipre congeló parcialmente los depósitos bancarios, lo que sorprendió a los chipriotas que ante la introducción de la medida, se apresuraron a retirar dinero de sus cuentas formándose largas colas ante las entidades bancarias.
Tras el 'pánico' que la posible implantación de la medida produjo en los mercados, los ministros de Finanzas de los 17 países de la eurozona instaron el pasado 18 de marzo a proteger los ahorros por valor de hasta 100.000 euros o inferiores, para que la tasa pudiera aprobarse. A cambio, propusieron elevar la quita a los depósitos más altos hasta el 15,6%.
La decisión preliminar sobre dicho impuesto fue tomada por el Gobierno ante la insistencia de los acreedores de la UE, pero causó una gran incertidumbre entre los inversores amenazando a la misma existencia del sistema financiero de Chipre. Por su parte, el Parlamento de Chipre rechazó el impuesto sobre los depósitos del país en una votación celebrada el 19 de marzo, bloqueando así el rescate que el país necesita para mantener a sus bancos a flote y para pagar los salarios de los funcionarios y los servicios sociales.
El mercado bursátil internacional, a su vez, manifestó su creciente desconfianza hacia el sistema financiero y el ‘paraíso fiscal’ chipriota, lo que se ha reflejado ya en una importante bajada de la cotización del euro como divisa y de las empresas y las entidades bancarias del país isleño.
Algunos expertos advierten que el país podría pagar un alto precio a nivel macroeconómico, dado que los impuestos de este tipo no solo afectarían a los chipriotas sino a miles de europeos y rusos con intereses comerciales y financieros en Chipre.
comentarios