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El Consejo de Seguridad de la ONU prorroga la misión de observadores en Siria por 30 días
El texto final del documento sobre Siria fue acordado por la mañana. Los miembros del Consejo de Seguridad necesitaron más de una hora para unificar los borradores británico y paquistaní.
El Consejo de Seguridad trató la prórroga técnica del mandato de los observadores de la ONU en Siria. Previamente Pakistán había propuesto prolongar la misión por 45 días. El Reino Unido, en cambio, había ofrecido extenderla 30 días y solo en el caso de que el Gobierno sirio ponga fin al uso de armas pesadas. Al final la misión fue prorrogada por 30 días.
La siguiente prórroga de la misión de los observadores de la ONU en Siria dependerá de si las partes involucradas en el conflicto pueden bajar el nivel de violencia en el país. Es lo que dice la resolución aprobada este viernes en el Consejo de Seguridad.
En particular, el texto del documento contiene una llamada a “garantizar la seguridad del personal de la misión sin afectar su libertad de traslados y accesos” y se subraya que “la responsabilidad primordial se atribuye a las autoridades sirias”.
El documento indica que el secretario general del Consejo de Seguridad presentará un informe sobre la situación en Siria y el desarrollo del proceso de arreglo pacífico “durante 15 días” desde el momento de la aprobación de la resolución.
“Estamos muy contentos porque, ante todo, la resolución es equilibrada y, además, apreciamos el papel que juega y le espera jugar a la misión de observadores en el conflicto sirio. Fuimos impulsores de la creación de esta misión; por eso creíamos que era muy importante que siga su trabajo”, dijo el representante ruso ante el Consejo de Seguridad de la ONU, Vitali Churkin.
Churkin declaró que le sorprendieron los términos que utilizó su colega estadounidense, Susan Rice, que puntualizó que la resolución asegura la evacuación de la misión. “Pero no es una resolución sobre la evacuación, sino sobre la extensión de la actividad de la misión”, dijo. Según Churkin, “no hay que confundir a la comunidad internacional, describiendo esta resolución así como lo hizo Rice”. La embajadora estadounidense, Susan Rice, a su vez, reiteró que EE.UU. tiene previsto intensificar su trabajo con un amplio grupo de socios fuera del Consejo de Seguridad para arreglar la situación en Siria.
El presidente ruso, Vladímir Putin, declaró que considera que cualquier acción acerca de la cuestión Siria que se emprenda fuera del Consejo de Seguridad de la ONU no será efectiva y socava el prestigio de esa organización internacional.
Ayer Rusia y China vetaron el borrador de la resolución occidental en el Consejo de Seguridad de la ONU, porque el documento preveía sanciones contra la república árabe. Al mismo tiempo Moscú se vio obligado a retirar su propio proyecto de resolución, ya que los países occidentales se negaron a trabajar con ese documento.
El representante permanente de Rusia ante la ONU Vitali Churkin calificó la proposición occidental de “contraproducente” debido a “la presión y las sanciones casi inevitables contra el Gobierno sirio” que conllevaba. "Los miembros occidentales podrían hacer por lo menos algo para el arreglo de la cuestión siria en vez de incitar a los grupos terroristas”, dijo tras la votación.
El vocero de la cancillería rusa Alexander Lukashévich, a su vez, cree que la misión de observadores de la ONU en Siria en actualidad es una de las fuentes de información más confiables sobre los acontecimientos en Siria. Según Lukashévich, la misión de los observadores ha sido un apoyo muy importante de la actividad de Kofi Annan en Siria.
Mientras tanto, Damasco vive sus días más dramáticos. La oposición siria envió a la capital más de 5.000 combatientes para apoyar el Ejército Libre Sirio que lucha contra las tropas regulares del ejército y la policía. El miércoles pasado, un atentado suicida se cobró la vida de varios miembros de la cúpula gobernante siria. Las fuerzas de Al Assad se centran en combatir a los grupos armados en Damasco, mientras pierden terreno en las fronteras con Irak y Turquía. La oposición armada domina todos los puestos de control en la frontera con Irak y dos pasos fronterizos cerca de Turquía.
La siguiente prórroga de la misión de los observadores de la ONU en Siria dependerá de si las partes involucradas en el conflicto pueden bajar el nivel de violencia en el país. Es lo que dice la resolución aprobada este viernes en el Consejo de Seguridad.
En particular, el texto del documento contiene una llamada a “garantizar la seguridad del personal de la misión sin afectar su libertad de traslados y accesos” y se subraya que “la responsabilidad primordial se atribuye a las autoridades sirias”.
El documento indica que el secretario general del Consejo de Seguridad presentará un informe sobre la situación en Siria y el desarrollo del proceso de arreglo pacífico “durante 15 días” desde el momento de la aprobación de la resolución.
“Estamos muy contentos porque, ante todo, la resolución es equilibrada y, además, apreciamos el papel que juega y le espera jugar a la misión de observadores en el conflicto sirio. Fuimos impulsores de la creación de esta misión; por eso creíamos que era muy importante que siga su trabajo”, dijo el representante ruso ante el Consejo de Seguridad de la ONU, Vitali Churkin.
Churkin declaró que le sorprendieron los términos que utilizó su colega estadounidense, Susan Rice, que puntualizó que la resolución asegura la evacuación de la misión. “Pero no es una resolución sobre la evacuación, sino sobre la extensión de la actividad de la misión”, dijo. Según Churkin, “no hay que confundir a la comunidad internacional, describiendo esta resolución así como lo hizo Rice”. La embajadora estadounidense, Susan Rice, a su vez, reiteró que EE.UU. tiene previsto intensificar su trabajo con un amplio grupo de socios fuera del Consejo de Seguridad para arreglar la situación en Siria.
El presidente ruso, Vladímir Putin, declaró que considera que cualquier acción acerca de la cuestión Siria que se emprenda fuera del Consejo de Seguridad de la ONU no será efectiva y socava el prestigio de esa organización internacional.
Ayer Rusia y China vetaron el borrador de la resolución occidental en el Consejo de Seguridad de la ONU, porque el documento preveía sanciones contra la república árabe. Al mismo tiempo Moscú se vio obligado a retirar su propio proyecto de resolución, ya que los países occidentales se negaron a trabajar con ese documento.
El representante permanente de Rusia ante la ONU Vitali Churkin calificó la proposición occidental de “contraproducente” debido a “la presión y las sanciones casi inevitables contra el Gobierno sirio” que conllevaba. "Los miembros occidentales podrían hacer por lo menos algo para el arreglo de la cuestión siria en vez de incitar a los grupos terroristas”, dijo tras la votación.
El vocero de la cancillería rusa Alexander Lukashévich, a su vez, cree que la misión de observadores de la ONU en Siria en actualidad es una de las fuentes de información más confiables sobre los acontecimientos en Siria. Según Lukashévich, la misión de los observadores ha sido un apoyo muy importante de la actividad de Kofi Annan en Siria.
Mientras tanto, Damasco vive sus días más dramáticos. La oposición siria envió a la capital más de 5.000 combatientes para apoyar el Ejército Libre Sirio que lucha contra las tropas regulares del ejército y la policía. El miércoles pasado, un atentado suicida se cobró la vida de varios miembros de la cúpula gobernante siria. Las fuerzas de Al Assad se centran en combatir a los grupos armados en Damasco, mientras pierden terreno en las fronteras con Irak y Turquía. La oposición armada domina todos los puestos de control en la frontera con Irak y dos pasos fronterizos cerca de Turquía.
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