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La Cámara de Diputados de México aprueba la reforma del sector petrolero
El pleno de la Cámara de Diputados dio el visto bueno a la reforma constitucional que por primera vez en 75 años abrirá el sector energético a una mayor inversión privada.
Según informó la agencia Notimex, tras la discusión sobre la reforma energética en una sede alterna del Palacio Legislativo de San Lázaro, la legislación fue aprobada por la Cámara Baja con 354 votos a favor y 134 en contra.
La sesión tuvo lugar horas después de que unos 50 legisladores de izquierdas tomaran la tribuna de la Cámara de Diputados, colocaran una barricada y bloquearan los seis accesos al salón del pleno. Los activistas exigían que el debate se celebrara primero en las comisiones.
Además, en pleno proceso de discusión legislativa sobre la reforma energética en el Palacio de San Lázaro, 'hackers' de Anonymous tumbaron la página web de la Cámara de Diputados y la del Congreso de la Unión de México (los sitios http://diputados.gob.mx/inicio.htm y http://congreso.gob.mx/).
El Senado de México aprobó esta semana la reforma impulsada por el presidente, Enrique Peña Nieto, que marcará el fin del monopolio del petróleo y del gas por parte del gigante estatal Pemex, que pugna por revertir una fuerte caída en la producción de crudo debido a una insuficiente inversión. La reforma permitirá conceder licencias a empresas privadas y compartir las ganancias petroleras con ellas.
Frente a la oposición de los izquierdistas, que opinan que con la privatización en el sector energético el país podría perder el control sobre recursos estratégicos y que prometieron librar una batalla dentro y fuera del Congreso para impedir que prospere la iniciativa, los oficialistas y conservadores argumentan que si el marco constitucional no se somete a cambios profundos, no será posible reforzar el sector energético de México, la segunda economía de Latinoamérica.
La propuesta ha suscitado numerosas protestas, ya que la modernidad del país siempre ha estado profundamente vinculada con el petróleo, cuya industria fue nacionalizada hace 75 años.
La sesión tuvo lugar horas después de que unos 50 legisladores de izquierdas tomaran la tribuna de la Cámara de Diputados, colocaran una barricada y bloquearan los seis accesos al salón del pleno. Los activistas exigían que el debate se celebrara primero en las comisiones.
Además, en pleno proceso de discusión legislativa sobre la reforma energética en el Palacio de San Lázaro, 'hackers' de Anonymous tumbaron la página web de la Cámara de Diputados y la del Congreso de la Unión de México (los sitios http://diputados.gob.mx/inicio.htm y http://congreso.gob.mx/).
El Senado de México aprobó esta semana la reforma impulsada por el presidente, Enrique Peña Nieto, que marcará el fin del monopolio del petróleo y del gas por parte del gigante estatal Pemex, que pugna por revertir una fuerte caída en la producción de crudo debido a una insuficiente inversión. La reforma permitirá conceder licencias a empresas privadas y compartir las ganancias petroleras con ellas.
Frente a la oposición de los izquierdistas, que opinan que con la privatización en el sector energético el país podría perder el control sobre recursos estratégicos y que prometieron librar una batalla dentro y fuera del Congreso para impedir que prospere la iniciativa, los oficialistas y conservadores argumentan que si el marco constitucional no se somete a cambios profundos, no será posible reforzar el sector energético de México, la segunda economía de Latinoamérica.
La propuesta ha suscitado numerosas protestas, ya que la modernidad del país siempre ha estado profundamente vinculada con el petróleo, cuya industria fue nacionalizada hace 75 años.
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