China y Rusia respaldaron este lunes a Irán, expresando su rechazo a la decisión de Francia, Alemania y el Reino Unido de iniciar un proceso de reintroducción de las sanciones de las Naciones Unidas a Teherán.
En una carta dirigida al secretario general de la ONU, António Guterres, y al presidente del Consejo de Seguridad, Eloy Alfaro de Alba, los ministros de Asuntos Exteriores de China, Rusia e Irán calificaron la medida promovida por el llamado grupo E3, de "legal y procesalmente defectuosa".
El documento ha sido compartido en las redes sociales por el ministro de Asuntos Exteriores iraní, Seyed Abbas Araghchi. En su publicación, el canciller afirmó que "al declarar nula la acción del E3, hemos dejado constancia de que ninguna parte puede borrar la secuencia de los hechos: fue Estados Unidos quien primero violó el JCPOA [Plan de Acción Integral Conjunto] y la Resolución 2231, y fue Europa quien posteriormente optó por alinearse con sanciones ilegales en lugar de cumplir con sus propios compromisos.
"También hemos reafirmado un principio fundamental del derecho internacional: los derechos y las obligaciones son inseparables. Los Estados que incumplan sus propios compromisos no pueden reclamar los beneficios de un acuerdo que han socavado. La credibilidad de la diplomacia multilateral depende de esta lógica. Lo que está en juego no son solo los derechos de Irán, sino la integridad de los propios acuerdos internacionales. Si se tolera el cumplimiento selectivo y el abuso procesal, la base misma de la seguridad colectiva se verá gravemente debilitada", expuso Araghchi.
El canciller iraní señaló que la función principal del Consejo de Seguridad de la ONU consiste en actuar en nombre de la comunidad internacional para garantizar "la paz y la seguridad". Sin embargo, "la propuesta del E3 traiciona esta misión, convirtiendo al Consejo en un instrumento de coerción en lugar de un guardián de la estabilidad global", concluyó.
¿De qué se trata?
El grupo E3 expresó en la carta que ha decidido activar el llamado mecanismo de restitución rápida antes de perder la capacidad de restablecer las sanciones contra Teherán, a mediados de octubre. Se trata del mecanismo, conocido como 'snapback', previsto en la Resolución 2231 del Consejo de Seguridad, que consagró el acuerdo nuclear de 2015 entre Irán y el Reino Unido, Alemania, Francia, Rusia y China, llamado Plan de Acción Integral Conjunto (JCPOA).
El proceso se prolongará 30 días antes de que se restablezcan las sanciones que cubrirían los sectores financieros, bancario, de hidrocarburos y de defensa de Irán. Por lo que, según el grupo europeo, se mantienen abiertos a una solución diplomática sobre un acuerdo nuclear.